En estos momentos debemos ser conscientes de que somos parte de una sociedad que se rige bajo la obsesiva necesidad de buscar la felicidad. En estos días es posible que desarrollemos malos hábitos compulsivos motivados por la tensión o el infortunio. Comer sin propósito, largas horas en redes sociales o el recurrir a drogas, son unas cuantos ejemplos. La obsesiva necesidad de conseguir placer terrenal nos ha hecho dejar de lado el placer espiritual, aquel que nos genera calma y plenitud en momentos de crisis.
¿Cómo hacer un detox para la mente?
- Respira profundamente 10 veces, inhalando lentamente por la nariz y exhalando por la boca.
- Con papel y lápiz en mano, realiza un horario de uso del celular. Por ejemplo, planificar tiempo en familia durante toda una tarde, y dejar la revisión de noticias a no más de una hora diaria.
- Aprender a disfrutar del silencio. Podemos crear una rutina de música, ya sea en la mañana o en la tarde, y alternarlo con tiempos de silencio.
- Limitar el uso de la televisión. Podemos iniciar con dos horas específicas al día, para darle espacio a otras actividades como lectura, manualidades, limpieza de espacios o para aprovechas a terminar actividades que hemos dejado aplazadas.
- Disminuir el consumo de comida chatarra. Planificar las tres comidas del día por una semana, de forma que logremos una repartición inteligente de víveres.
- Disminuir la compra de objetos varios que seguramente no son necesarios en estos momentos, como ropa, maquillaje, enseres, etc. Elementos que de seguro tienes demás en el closet.
El arrancar con este detox será bastante duro, pero a medida que empieces a llenar aquellas carencias con acciones productivas y sanas, verás acercarse la claridad mental, la energía y se rellenarán los vacíos emocionales.